Hablar de la transformación digital como un proceso lento y progresivo es cosa del pasado. Los últimos acontecimientos sanitarios han acelerado más aún el paso de nuestra sociedad, empresas y sistemas productivos a un escenario online sin precedentes y totalmente necesario.
La transformación digital es ya una realidad y conlleva ciertas obligaciones en cuanto a inversión en nuevas tecnologías, formación de los empleados y empleadas, seguridad en los sistemas y transferencias de datos, etc. La inversión inicial puede resultar abrumadora y vertiginosa, como también el proceso de puesta al día; sin embargo, las ventajas superan con creces estos primeros escollos que, por otra parte, son fáciles de solventar con el apoyo necesario.
Lo que la digitalización puede hacer por tu negocio
Eficacia, rapidez, seguridad y sostenibilidad son solo algunas de las bondades que conquistan las organizaciones dispuestas a entrar de lleno en la digitalización de sus negocios. Y es que, la total conectividad y un aumento en la seguridad de los procesos motivan ventajas tan poco desdeñables como:
La reducción de una importante carga de trabajo en los departamentos de RRHH. Todo ello gracias a softwares de gestión o ERPs inteligentes que brindan rapidez e inmediatez sin papeleo ni desplazamientos innecesarios.
Un incremento en el número de ventas, sobre todo debido a la conquista de nuevos mercados de la mano de plataformas ecommerce que favorecen la venta de bienes de consumo a miles de kilómetros.
El aumento en el nivel de satisfacción de los clientes mediante la mejora del servicio postventa, por ejemplo, habilitando canales de comunicación bidireccional a través de redes sociales, etc.
La optimización de recursos y el incremento de la productividad gracias a herramientas tecnológicas que automatizan procesos repetitivos y tediosos.
Ventajas como estas permiten importantes ahorros, mayores ventas y un mejor control sobre la actividad empresarial. Si a esto sumamos el éxito de los servicios Big data en el tratamiento de datos con fines predictivos o de análisis de comportamientos, el éxito está servido.
La digitalización puede absorber todos los procesos de cualquier empresa o simplemente tratar de agilizar aquellos más problemáticos. Sea como sea, el futuro de cualquier actividad pasa por abrazar un escenario online casi por completo.
