Hacienda ha confirmado el aplazamiento de VeriFactu mediante el Real Decreto-ley 15/2025 el martes 2 de diciembre, publicado en BOE.
Las nuevas fechas son claras: las empresas deberán cumplir a partir del 1 de enero de 2027, mientras que los autónomos tendrán hasta el 1 de julio de 2027. Este cambio responde a la presión de asociaciones empresariales y busca garantizar una implantación ordenada. No es una cancelación, la obligación sigue vigente.
¿Por qué se ha aplazado Veri*Factu?
El retraso se justifica principalmente por dos motivos:
- Por un lado, muchas pequeñas y medianas empresas no estaban suficientemente preparadas: los datos más recientes apuntaban a que solo una parte mínima había comenzado la adaptación.
- Por otro lado, desde asociaciones empresariales y gestores se habían detectado dificultades técnicas y operativas para cumplir la normativa en un plazo tan ajustado.
El aplazamiento responde a la necesidad de garantizar una implantación ordenada y homogénea, y a facilitar que el tejido empresarial, sobre todo pymes y autónomos, tenga margen real para ponerse al día sin riesgo de sanciones masivas.
¿Qué significa este aplazamiento para tu empresa?
No significa bajar la guardia: si bien se gana tiempo extra para planificar, la obligación sigue vigente. En 2027 habrá que estar preparados, y Hacienda podrá exigir cumplimiento o sanciones si no lo estás.
Este nuevo calendario no cambia el objetivo, solo la fecha. La adaptación a Verifactu sigue siendo obligatoria y el nivel de exigencia será el mismo. La diferencia es que ahora las empresas pueden reforzar lo que ya venían preparando, revisar que todo esté alineado con los requisitos técnicos y facilitar una transición más ordenada dentro de sus propios procesos.
¿Y para quienes ya se adelantaron?
Para muchas empresas, que ya se adaptarse a Veri*Factu ha sido una decisión acertada. Estas son algunas de las ventajas de haber sido proactivo:
- Eficiencia operativa inmediata: sus procesos de facturación ya son digitales, automáticos y homologados. No tendrán que hacer migraciones de última hora, lo que evita interrupciones en el negocio.
- Ventaja competitiva ante clientes y proveedores: demostrar cumplimiento normativo completo les da una imagen de seriedad y profesionalidad.
- Posibilidad de optimizar procesos extra: al haber actualizado ya el sistema, pueden usar este cambio como palanca para revisar sus flujos, mejorar la gestión, automatizar otras áreas y profesionalizar toda la administración.
¿Por qué Odoo un aliado ideal frente a Verifactu?
Si utilizas un ERP modular como Odoo, tienes una ventaja clara:
- Ofrece módulos adaptables que pueden incorporar las exigencias de Verifactu: generación adecuada de identificadores, códigos QR o similares, registro inalterable, trazabilidad y opción de envío automatizado.
- Gracias a su estructura modular, puedes añadir o actualizar componentes sin necesidad de migraciones complejas: ideal para empresas que aún están creciendo o diversificándose.
- Te permite manejar todo desde una misma plataforma: contabilidad, facturación, stock, gestión de clientes/proveedores — reduciendo riesgos de fallos por soluciones parcheadas o múltiples sistemas.
Por tanto, aprovechar este tiempo extra para revisar, adaptar o migrar tu ERP con Odoo puede marcar la diferencia entre un cumplimiento apresurado con errores… o una transición tranquila, eficaz y escalable.
Conclusión: el aplazamiento como oportunidad
El retraso de Verifactu a 2027 no debe verse como una excusa para descansar, sino como una ventana de oportunidad: tiempo para planificar, probar, preparar y profesionalizar tu sistema de facturación.
Si tienes previsto usar un ERP como Odoo (o ya lo usas), aprovechar este margen te permite convertir una obligación fiscal en una ventaja competitiva: cumplimiento normativo, eficiencia operativa y tranquilidad para tu negocio.
Si quieres revisar tu situación, resolver preguntas o asegurarte de que tu empresa llegará preparada a 2027, contacta con nosotros. Te ayudamos a dar el siguiente paso con tranquilidad.